El enfoque es siempre el mismo sin importar la industria: integrar sistemas fragmentados, modelar la ontología empresarial, unificar datos, y desplegar AI contextual. Pero la implementación específica cambia completamente según tu sector porque cada industria tiene su propio ecosistema de software y sus propios problemas operativos. Una planta manufacturera necesita que integremos PLCs con su ERP para tener visibilidad de producción en tiempo real. Una operación retail requiere sincronizar POS con e-commerce para inventario omnicanal real. Una clínica necesita unificar expedientes médicos con laboratorios para que el doctor tenga el historial completo. Los sistemas son diferentes, las entidades que modelamos son diferentes, y los casos de uso de AI son diferentes, pero el principio de conectar lo fragmentado para desplegar inteligencia contextual es el mismo.